· El grupo de trabajadores municipales, que actualmente sólo se compone de 10 empleados, carecen de uniformes homologados para los servicios que prestan
La agrupación de Ciudadanos La Línea se ha reunido en estos días con los vigilantes municipales auxiliares, un colectivo que se encuentra en una especie de «limbo legal», según definen los propios vigilantes, en el que no cuentan con seguridad ni apoyo del Ayuntamiento. No sólo por la Relación de Puestos de Trabajo (RPT), sino por la actualización del Decreto 346/2003, de 9 de diciembre, de regulación de los Registros de Policías Locales y Vigilantes Municipales que pone en peligro sus puestos de trabajo.
Este grupo de trabajadores municipales, que llegó a contar con 36 vigilantes, ha quedado mermado a un pequeño grupo de diez personas, que según explicaron al partido naranja linense, temen estar abocados a la desaparición dado el absoluto abandono por parte del Consistorio.
Así, según lamentaron, en la RPT que se está llevando a cabo en el Ayuntamiento, no se les da cabida de la manera que consideran adecuada. Son enviados a una nave de limpieza, o incluso despedidos, a pesar de que La Línea es una ciudad muy deficitaria en Seguridad y Regulación Vial. De otro lado, las carencias de uniformes es tal que los pocos facilitados no están homologados para las funciones que efectúan. Además, según aseguran, no reciben prácticamente ningún respaldo legal por parte del Ayuntamiento en las intervenciones que efectúan.
El coordinador y portavoz de Ciudadanos La Línea, Fran López, ha mostrado su preocupación, afirmando que «el Ayuntamiento no puede escatimar en la seguridad de nuestra ciudad, ni dejar de lado a un colectivo de trabajadores» advirtiendo que «no vamos a permitir que nuestro gobierno municipal se olvide de las necesidades de nuestros ciudadanos y menos en aspectos tan importantes como el trabajo y la seguridad«.